El fabuloso playboy revive en el nuevo libro de nuestro amigo y colega Roberto Alifado, prestigioso escritor y poeta argentino que ya es best seller del año. Programas de radio y televisión de Latinoamérica, Estados Unidos, España, Francia e Italia le dedican espacios a este volumen con una repercusión insospechada, que cuenta los romances del gran seductor internacional.
"Macoco", un aristócrata argentino, perteneciente a la clase alta, fue el Rey de la Noche durante los años veinte y treinta en París, Nueva Cork, Beverly Hills y Buenos Aires. Fue ama nte de las más famosas strellas de cine: Rita Hayworth, Gloria Swanson, Claudette Colbert, Dolores del Río Ginger Rogers, Greta Garbo y Marlene Dietrich, entre tantas otras. Acuñó la famosa frase "Tirar manteca al techo", una expresión aún muy usada en la Argentina que define a quienes derrochan su dinero.
Lo de "tirar manteca al techo" es de moi, eso sí lo acuñe yo, afirmó Macoco, con una sonrisa.
-¿Por qué no explicás de dónde viene esa frase tan famosa? -le preguntaron-. ¿Cuál es el origen de "tirar manteca al techo"?
-Viene del restaurante Maxim´s de París, donde yo invitaba a comer a mis amigos. Resulta que en uno de los salones especiales había una pintura en el techo, sin duda inspirada en Rubens, con unas valquirias de senos prominentes y tentadores que sobresalían de los escotes. Una noche yo puse manteca en el tenedor y empecé a tirarla para ver si la embocaba entre las tetas de las mujeres de la pintura. Se armó un torneo entre quienes me acompañaban. Todos los muchachos empezaron a tirar manteca al techo…
El fundador del Morocco, junto a Al Capone, fue el inspirador de la palabra "playboy". Y ya es un mito en el mundo a través del reciente libro de Roberto Alifano. Mecenas e Carlos Gardel, amigo íntimo de Juan Domingo Perón y condecorado por el mismísimo Charles de Gaulle.
El nuevo libro de Alifano es imperdible y muestra la belle época que supimos tener los argentinos, una época en la que si bien había miseria también teníamos un estrato social que vivía a lo grande, muy a lo grande.
Allí estaba instalado Martín Máximo Pablo de Alzaga Unzué, nuestro incomparable e inolvidable Macoco.
Ismael Garzón (Director del Taller Escuela Mariano Moreno, de Periodismo y Comunicación)